Otros temores
Muchas personas que lo padecen, presentan además múltiples y variados temores centrados fundamentalmente alrededor de tres aspectos: miedo a abandonar el hogar, miedo a quedarse solo o miedo a encontrarse lejos del hogar en situaciones en las que se sientan atrapados, molestos o indefensos, lo que se denomina AGORAFOBIA. Estas situaciones se evitan por miedo a que aparezca una crisis de angustia, lo que lleva a estas personas a limitar cada vez más sus actividades.
Su importancia
Los trastornos de pánico constituyen una enfermedad real e importante, que puede afectar seriamente a la vida de la persona que lo padece y que, aunque puede mejorar ocasionalmente, no suele desaparecer a menos que se reciba un tratamiento adecuado.
Tiene tratamiento específico
Esta enfermedad puede controlarse con un tratamiento específico. Una combinación de psicoterapia y medicamentos (existen varios eficaces) previene crisis posteriores y hace que estas sean cada vez menos frecuentes e intensas, consiguiendo buenos resultados en el 70-90% de las personas que padecen estos trastornos.
Su neurólogo es la persona indicada para valorar los posibles tratamientos, qué fármaco es el más conveniente, cuánto tiempo lo necesita y qué posibles efectos adversos pudiera causarle.
Para asegurar los mejores resultados terapéuticos es muy importante la constancia en el cumplimiento del tratamiento.
Estrategias para combatir el pánico
- Recuerda que aunque tus sentimientos son muy atemorizadores, no son peligrosos ni dañinos.
- Comprende que lo que estás experimentando es sólo una exageración de tus reacciones corporales normales ante el estrés.
- No luches contra tus sentimientos ni intentes alejarlos, cuanto menos te enfrentes a ellos menos intensos serán.
- No aumentes tu pánico pensando qué podría pasar. Si te encuentras preguntándote ¿qué pasaría si?, contéstate ¡bueno, ya está, sólo es esto!.
- Permanece en el presente. Date cuenta de lo que realmente te está pasando y oponlo a lo que piensas que podría pasar.
- Gradúa tu nivel de miedo desde 0 a 10 y mira si sube o baja. Verás que no permanece en altos niveles por más de unos segundos.
- Cuando te encuentres pensando qué te va a pasar cambia tu pensamiento y lleva a cabo alguna tarea como contar hacia atrás desde 100 de 3 en 3.
- Sé consciente de que cuando tu paras de añadir sentimientos de temor a tu situación, tu miedo comienza a ceder.
- Cuando el pánico llega, acéptalo. Espera y dale tiempo a que pase sin salir corriendo.
- Siéntete orgulloso de ti mismo por tus progresos y piensa lo bien que vas a sentirte cuando lo superes esta vez.
- Intenta distraerte, ahora que el nerviosismo ha bajado, habla con alguien, da un paseo, etc.
¿Cómo pueden ayudarme la familia y amigos?
La familia y amigos son muy importantes. Unas recomendaciones específicas para ellos:
- Intentar no trivializar sobre lo que está ocurriendo y hacer que la persona se sienta comprendida.
- Escuchar sin ser críticos. Nunca presionarles.
- Informarse sobre el tipo de tratamiento, acompañarle al Centro de Salud cuando sea necesario.
- Compartir actividades que puedan ser agradables.